Adentrarnos en el mundo de la radiestesia es dar un paso adelante para comprender y conocer los péndulos
Con la practica necesarias y la coherencia que se merece, debe llegar a ser una prolongación de nuestro propio ser.
Eso sí, siempre con respeto y no utilizándolo de una marera frívola, irresponsable y sin conocimiento.
Como todo tipo de herramientas, el trabajo con el péndulo precisa de una preparación a todos los niveles y de un sentido de la responsabilidad muy grande.
Debemos tener muy presente que existen muchos factores que pueden alterar su buen funcionamiento y esos factores son externos al propio péndulo.
Estos factores suelen ser más bien nuestros propios condicionamientos, los malos habito que adquirimos e interferencias de las personas que nos rodean, entre otras.
Ahora bien, si se trabaja con el péndulo con el conocimiento necesario, este nos puede deparar muy gratas sorpresas.
Otro tema que debemos tener en cuenta es la diversidad de péndulos que existen. Podemos clasificarlos por el material en el que están confeccionados como el cuarzo, metal, orgonita, madera, etc.
Por su forma, ya que dependiendo de ella puede variar su línea de trabajo. También los podemos diferenciar por su peso, porque sí vamos a trabajar en el exterior requeriremos uno con un mayor peso, tenemos los emisores que irradian ondas de forma….
Realmente la variedad de ellos es muy grande.
Un apartado a parte requiere los péndulos terapéuticos, de los cuales debemos conocer muy bien las particularidades de cada uno de ellos antes de comenzar a trabajar con ellos.
Tengamos muy presente que existen modelos que pueden llegar a momificar tejidos, otros pueden ampliar las ondas mentales…son características que bien empleadas nos pueden ayudar muchísimo, pero si no sabemos muy bien cómo trabajan pueden llegar a provocar problemas en el terapeuta.
Por eso os estoy recalcando e insistiendo en la necesidad de conocer el péndulo radiestésico en toda su extensión antes de comenzar a trabajas con él, si es así con ellos podemos lograr desde el equilibrio de nuestro sistema energético, la limpieza de una vivienda o lugar, la detección de problemas telúricos que nos afectan en nuestro día a día, podemos llegar a momificar tejidos dañados…… son tantas las posibilidades que es imposible enumerarlas todas, se puede decir que nos ayudan en todos los ámbitos de nuestra vida.
Me gustaría ayudaros a que sintierais la fuerza de los péndulos en vosotros mismos, por eso os animo a que si necesitáis cualquier información no dudéis en consultarme.
¿Te gusto la publicación? Compártela.